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¿Te amas y amas a tu familia?


 

 

Los hábitos alimentarios sanos comienzan desde los primeros años de vida; la lactancia materna favorece el crecimiento sano y mejora el desarrollo cognitivo además de reducir el riesgo de sobrepeso, obesidad y  enfermedades no transmisibles en etapas posteriores de la vida del niño.

 

 


Una alimentación saludable consiste en ingerir una variedad de alimentos que  brinden los nutrientes que se necesitan para  sentirse bien y tener energía. Estos nutrientes incluyen las proteínas, los carbohidratos, las grasas, el agua, las vitaminas y los minerales.

 

Una buena alimentación  combinada con  actividad física  es una forma excelente de ayudar al cuerpo a mantenerse fuerte y saludable ya que lo que se come influye en el sistema inmunitario y en el estado de ánimo. Esta dieta saludable ayuda a evitar  enfermedades como la diabetes,  cardiopatías, desnutrición,  accidentes cerebrovasculares y el cáncer entre otras enfermedades.

 

Sin embargo, el aumento de la producción de alimentos procesados, la rápida urbanización y el cambio en el estilo de vida ha dado lugar a un cambio en los hábitos alimentarios.

 

Actualmente se  consumen más alimentos hipercalóricos, grasas trans, azúcares libres y sodio, dando pie al aumento de las enfermedades antes mencionadas.

 

Debido a esto es importante el papel de los padres en esta tarea de la  responsabilidad de la alimentación de la familia, con la toma de conciencia se podrá evitar que nuestros niños sigan siendo parte de las estadísticas aterradoras de enfermedades debido a la mala alimentación. Sabemos que es difícil cambiar el tipo de alimentación de un día para otro, sin embargo dando pequeños cambios y sobre todo informándose e investigando es la mejor manera de ofrecer una sana alimentación a nuestra familia en estos días, donde debido a la pandemia se vio la importancia de mantener nuestro sistema inmunológico fuerte. Estos cambios en el estilo de vida  será la mejor manera de demostrarnos amor a nosotros mismos y a nuestras familias. No basta con el nuevo etiquetado en los productos, ni basta con las leyes en algunos estados para prohibir la venta de comida basura a menores de edad, se necesita por parte de los padres reeducar a los hijos en los cambios alimenticios para poder disfrutar de una vida más sana, es el mejor legado que se puede dejar a ellos que tanto se les ama.  

 

 

En la siguiente tabla podrás observar alternativas para realizar los cambios necesarios en la alimentación, sugiriendo sean graduales:


Comidas procesadas o preparadas como Pizza, hamburguesas, hot dogs.

 

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Comida casera y  del día.



Golosinas, chocolates, galletas, dulces, pastelillos.

 

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Almendras, nueces, pasas, pistaches, arándanos, semillas de girasol, cacahuates, pepitas, Frutas de temporada.



Papas fritas

 

 

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Pepinos, zanahorias, jícama, betabel, peras, manzana, ralladas o picadas con limón.



Aceites vegetales  de todo tipo (soya, canola, maíz, cártamo y girasol).

 

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Aceite de oliva virgen o extra virgen.  Aceite de aguacate para aderezar ensaladas.



Enlatados como sopas, frijoles, legumbres, atún, cremas de verduras, verduras.

 

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Comida fresca, casera, recién preparada sin sodio y sin  aditivos químicos ni colorantes ni conservadores.



Refrescos, jugos procesados, bebidas energizantes, bebidas deportivas.

 

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Jugos de verduras, suero casero, tés  e infusiones naturales,  smoothie o batidos de verduras.



Palomitas de microondas con aditivos y sodio.

 

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Palomitas hechas en casa.



Concentrados de pollo alto en sodio y aditivos como glutamato monosódico.

 

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Ajo, cebolla y especies. Caldo de pollo casero.  Cubos de caldo casero de verduras.



Comida frita, rebozada, empanizada o al carbón.

 

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Comida cruda, horneada, al vapor o cocida.



Leche

 

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Bebidas vegetales de almendra, avena preparadas en casa.



Embutidos como salchicha, jamón, salami, tocino, chorizo.

 

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Carne  pollo, pescado o res(Esta última en mínima cantidad).



Chocolate 

 

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Bebida preparada con cacao en polvo.



Mantequilla, margarina, manteca de cerdo.

 

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Ghee.



Pan, pasteles de trigo.

 

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Pan y pasteles elaborados con harina de almendra o de amaranto, de chía o de avena.



Arroz y sopas de pasta.

 

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Cremas de verduras, sopas de verduras, sopa de ajo, de poro, de apio, lentejas, habas, alubias, quínoa.



Yogurt.

 

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Yogurt casero.



Sal.

 

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Sal de mar o sal del himalaya en cantidad mínima.



Azúcar refinada.

 

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Miel  o azúcar mascabado en mínima cantidad.



Puré de papa.

 

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Puré de camote.



Vitaminas y minerales: semillas de linaza, ajonjolí, chía, pepita, girasol, de preferencia molidas para  aprovechar sus nutrientes.

 


 

En esta página podrás consultar la variedad de  recetas y bebidas que podrás ofrecer a tu familia.

 

 

 

En los siguientes videos podrás encontrar mayor información acerca del tema, así como recetas de para preparar bebidas vegetales, yogurt casero, mix de semillas y ghee entre otros, el último enlace es un video acerca de  la alimentación antiinflamatoria:

 

CONCENTRADO DE POLLO 

CONCENTRADO DE VERDURAS

LECHE DE VACA



RECETA DE BEBIDAS VEGETALES

SEMILLAS

GHEE



RECETA DE GHEE

YOGURT CASERO

HARINAS SANAS



NUTRICIÓN ANTINFLAMATORIA  


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